Reconociendo de antemano la fuerza que ejercen los números en nuestra vida, hayamos que es posible calcular el futuro a través de los secretos de la Numerología. Cada número y letra posee una fuerza y misticismo capaz de guiarnos por el sendero correcto, pero también de hacernos caer en un abismo.
Además, todo en el universo y la tierra posee un orden exacto. Nada está por casualidad. Todo lo que vemos y lo que percibimos posee vibraciones energéticas que influyen en nuestros actos. Lo hacen en el presente, lo han hecho en el pasado y seguirán haciéndolo en el futuro.
Cómo se calcula el cuadro numérico
Lo primero que debemos hacer es colocar el alfabeto numérico sobre un papel. Cada letra posee una cifra correspondiente, comenzando desde el 1 que le correspondería a la A, el 2 a la B y así sucesivamente. Sin contar con las letras CH, RR o LL. Después dividimos esto en vocales y consonantes. La Y la tomamos siempre como consonante. Con esto en mente comenzaremos a analizar la vibración del nombre propio de la persona.
La personalidad entonces se fragmenta en 5 facetas de vibración. La del interior es la suma de las vocales de dicho nombre. Aquí se habla de la fuerza interna y motivaciones internas. La vibración exterior es el resultado de la suma de las consonantes. Revela la proyección hacia afuera de la personalidad. La impresión que se produce hacia el resto de personas. Cómo se ve desde el ámbito social, laboral y personal.
Metas en la vida
La meta en la vida se calcula con la suma de las dos vibraciones anteriores. Se descubre cuáles son los objetivos, los fines, conscientes y subconscientes de cada individuo. La individualidad se calcula con la separación y suma de todos los números del nombre completo. Es decir la cantidad de dígitos por cada nombre y cada apellido.
Aquí se buscan las cualidades y debilidades de la persona analizada. Por último el temperamento surge a través de la separación y agrupación de los números anteriores. Revelan las inclinaciones naturales de la persona y las aptitudes predispuestas en ella.
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