Confesiones de un numerólogo – Parte II

A partir de entonces, me enganché. Desde aquellos primeros días, he hecho miles de cartas y todavía no he conocido a un «1», que se comportó como un «2», y viceversa. Años más tarde, trabajé como una casa psíquico en un club en Houston y uno de mis preferidos «trucos» fue utilizar la fecha de nacimiento de alguien a dígale exactamente qué año había sido especialmente transformadora. Nunca dejaba de impresionar. O me gustaría tener su fecha de nacimiento y el nombre completo al nacer y «adivinar» la profesión elegida.

Cualquiera que esté familiarizado con la mecánica de la numerología sabe que no se trata de trucos, pero estableció y métodos probados. Y puesto que, como Casa psíquico, mi primera y principal tarea consistía en entretener, el hecho de que pueda memorizar y hacer bastante extensa matemáticas sin necesidad de lápiz y papel, sin duda me ayudó a usar estos métodos sin perder tiempo.

Otro ejemplo de la precisión y beneficios de la numerología es la siguiente: Durante los muchos años que trabajé como un numerólogo práctica, los clientes llaman para una cita y me dan su nombre y fecha de nacimiento. Yo haría la tabla de antemano – y desde un gráfico Numerología completo incluye un centenar o más cálculos, tomaría un poco de tiempo durante el cual estaba enfocado casi exclusivamente en los números de esa persona. El resultado notable fue que me gustaría saber lo que esa persona parecía, su lenguaje corporal y otras percepciones intuitivas en la medida en que yo podría haber elegido a esa persona de una multitud.

Este es el extraño poder de la numerología. Ya no pienso en Numerología como pseudo-ciencia extraña y oscura. Pienso en ello como un ejemplo de la perfección inmaculada que subyace – y es la fuente primordial de – esta creación. Todas las cosas están conectadas, todas las cosas reflejan todas las otras cosas. La armonía y el equilibrio de esta creación es perfecta y perfectamente sincronizado. Tendemos a juzgar todo lo que vemos y experimentamos. Pedimos algunas cosas buenas y otras cosas malas. Y eso es lo que debería ser – hasta cierto punto.

Desde otra perspectiva, sin embargo, también tenemos que entender que darse cuenta el verdadero valor de lo que está dentro y fuera de nosotros no está al alcance de nuestra mente finita de entender. Aquí es donde entra en juego la fe, no la fe ciega, sino la fe que viene de la comprensión de que no hay tal cosa como el azar, no hay tal cosa como una coincidencia, y no hay tal cosa como accidental. Que todo está bien y como debe ser. Sus opciones y decisiones influyen en los acontecimientos de mañana, y cada momento, cada respiración, trae oportunidades que usted nunca podría haber predicho.

A menos que, y hasta cierto punto, usted ha hecho su meta para aprender un poco de pseudo-ciencia extraña y oscura, como la numerología.